Benito
Pérez Galdós, Aita Tettauen (1905)
Guía de lectura
PRELIMINAR:
Aita Tettauen es una novela histórica que pertence a la serie de 46 novelas históricas --"episodios nacionales"-- escritas por el prolífico novelista Benito Pérez Galdós, entre 1872 y 1912. En cada una de estas novelas Galdós convierte en ficción 46 diferentes momentos o "episodios" de la historia nacional española reciente, desde 1805 hasta 1880. La ficción fue para este discípulo de Charles Dickens (y del realismo europeo) el laboratorio donde procuraba confirmar sus teorías acerca de las causas históricas del momento actual, donde especulaba acerca de particular forma de ser y de pensar de los españoles. Galdós nos tienta a cuestionar en cada momento de la relación entre historia y ficción, la realidad y su representación.
El "episodio nacional" que Galdós trata en Aita Tettauen es la declaración de guerra por el gobierno de Antonio Cánovas del Castillo, en 1859, con Isabel II sobre el trono. La forma de goberno en España en este momento fue, como es hoy, una monarquía parlamentaria. El monarca es el jefe del Estado; el Primer Ministro, el presidente del gobierno
La novela empieza con la declaración de la guerra, en octubre de 1859, y termina con la entrada de las tropas españolas en la ciudad marroquí de Tetuán en la primavera de 1860. Cómo se nos presentan los hechos --las diferentes voces (narrativas) y lentes (perspectivas)-- son tan importantes como los hechos mismos, tal vez incluso más.
El título de la novela deriva de:
- Aita = un género musical popular en el que el canto predomina sobre los
demás componentes (ritmos, danzas, etc.). El término 'aita',
que deriva del verbo 'ayyat' (=llamar), nos recuerda que casi todas las
'aitas' comienzan con la invocación de Allah y de sus tantos. La
llamada ('aita') señala por tanto el comienzo y sirve para invocar
la inspiración divina.
- Tettauen = el nombre de la ciudad Tetuán, que significa Ojos de manantiales y que está situado en el norte de África, a poca distancia
de Ceuta (enclave español).
Antes de comenzar la novela puedes aprender más sobre Galdós y sobre su época en:
Una
introducción a la historia de España en el siglo XIX
Benito
Pérez Galdós en contexto
|
Atienza:
"El ejército de África
recibido en la Puerta de Sol (Madrid)"
|
LA GUERRA DE AFRICA:
1859 - 1860: La Guerra de África (timeline) estalla bajo el reino de Isabel II en diciembre de 1859 y, en su primera campaña, duró cuatro meses, terminando con el tratado de Wad-Ras el 26 de abril de 1860. A consecuencia de su victoria en esta primera campaña, España garantizó su presencia político-militar en el continente africano, precisamente en los enclaves de Ceuta y Melilla (todavía hoy pertenece a España) además de otros pequeños territorios anteriormente pertenecientes al sultanato de Marruecos.
En 1909 (timeline) las tribus del norte de Marruecos se sublevaron, dándose lugar el comienzo de la segunda fase de la Guerra de África, llamada también la Guerra del Rif, por el nombre de las montañas del norte de Marruecos. En esta nueva fase militar España amplió su dominio territorial sobre el llamado Protectorado Español, creado gracias a los acuerdos hispano-franceses de 1912. Los conflictos bélicos continuarán de forma más o menos esporádica casi dos décadas, hasta la pacificación del Protectorado en 1927. En 1956 España devuelve este territorio a Marruecos.
Sobre todos los episodios de la guerra de África o del Rif se destaca la batalla de Annual (Nador, 1921; timeline) como el más cruento, una auténtica carnicería en la que alrededor de 10.000 tropas españolas pierden la vida. El "desastre de Annual," será el tema de nuestras próxima lectura, la novela Imán de Ramón Sender. El desastre produjo una enorme reacción popular y literaria en España y condujo en 1923 a la caída de la monarquía --Alfonso XIII-- y la subida al poder del dictador Miguel Primo de Rivera.
TERMINOLOGÍA GEOGRÁFICA
La acción empieza en Madrid pero transcurre, en su mayoría, en el norte de Marruecos (adjetivo: marroquí, marroquíes). En este mapa, identificar los puntos de referencia geográficos principales: Madrid, Ceuta, Tetuán ("Ojo de Manantiales," en la novela) y Fez.
El Magreb (adjetivo: magrebí, magrebíes) es una denominación geográfica que se aplica la parte occidental del norte de África. Identifica los países que configuran el Magreb en estos mapas:
PRIMERA
PARTE: Madrid, octubre-noviembre de 1859
El árbol genealógico de la familia Jerónimo Ansúrez |
Jerónimo Ansúrez,
el “celtíbero”
(de Villa del Prado, Osma) |
Vicente Halconero - Lucila
Ansúrez |
Gonzalo Ansúrez
(‘El Nasiry’;
'muladí) |
Leoncio Ansúrez - Virginia |
Vicentito |
Pilarita |
Bonifacio |
Manolo |
¿? |
|
|
Otros personajes:
- Jacob Méndez
- Juanito Santiuste: vinculado a Leoncio Ansúrez por sus aficiones literarias
|
- Originarios de una ciudad pequeña, el Burgo de Osma, en el corazón de la Castilla más tradicional, Vicente y Lucila Halconero se trasladan a Madrid con el fin de buscar una solución médica a la enfermedad que su hijo, el joven Vicentito, padece tras la caída de un caballo. La familia se instala en su casa en la plazuela Concepción Jerónima, para el deleite del niño, adicto a las historias de heroismo militar. Convaleciente, el niño se convierte en espectador del drama nacional --la euforia belicista popular-- que se desata cuando Cánovas del Castilla declara la "guerra contra el moro." Es el mes de octubre de 1859.
- ¿De qué manera podría ser programático este primer párrafo? ¿Qué anuncia, en cuanto al tema de la novela?
"Antes de que el mundo dejara de ser joven y antes de que la Historia fuese mayor de edad, se pudo advertir y comprobar la decadencia y ruina de todas las cosas humanas, y su derivación lenta desde lo sublime a lo pequefio, desde lo bello a lo vulgar, cayendo las grandezas de hoy para que en su lugar grandezas nuevas se levanten, y desvaneciéndose los ideales más puros en la viciada atmósfera de la realidad. Decaen los imperios, se desmedran las razas, los fuertes se debilitan y la hermosura perece entre arrugas y canas ... Mas no suspende la vida su eterna función, y con los caminos que descienden hacia la vejez, se cruzan los caminos de la juventud que van hacia arriba. Siempre hay imperios potentes, razas vigorosas, ideales y bellezas de virginal frescura; que junto al sumidero de la muerte están los manantiales del nacer continuo y fecundo..." (1)
- Nótese el fuerte énfasis en cuestiones genealógicas
- Toman nota de la exactitud histórica (fechas) y geográfica o urbanística (Madrid) como técnias del realismo y para entrelazar historia
y ficción.
- Los primeros datos políticos
nos llegan filtrados por la conciencia imperfecta o parcial de los personajes,
"pequeños seres": explicar.
- ¿Puedes detectar alguna nota de ironía en la última frase: "Tras de Halconero permanecía rígido y mudo Jerónimos Ansúrez; su rostro castellano, de austera y noble hermosura . . . expresaba un vago renacer de grandezas atávicas (ancestral)" (12).
- Diferentes miembros de la familia Ansúrez reflexionan sobre los dilemas que la nueva situación política supone para ellos.
- ¿Cómo interpretas la hermanda hispano-marroquí que Vicente
Halconero plantgea? Analiza, por ejemplo:
"Otra cosa les digo, para que se pongan en lo cierto al entender de guerras africanas, y es que el moro y el español son más hermanos de lo que parece. Quiten un poco de
religión, quiten otro poco de lengua, y el parentesco y aire de familia saltan a los ojos. ¿Qué es el moro más que un español mahometano? ¿Y cuántos españoles vemos que son moros con disfraz de cristianos? . . . Otros ejemplos sacaré, si por lo que he dicho no me confiesan que esta guerra que ahora emprendemos es un poquitó guerra civil ... Pero civil o de naciones, adelante con ella, y veamos otra vez a Cristo vencedor de Mahoma."
- Toma nota desde el comienzo de las referencias a los celtíberos y trata de relacionar estas referencias con una cierta actitud nacionalista comentada por Américo Castro en La realidad histórica de España.
NOTA CULTURAL / Los celtíberos: El término "celtíbero"
es crucial para comprender las implicaciones histórico-culturales
de esta obra. Américo Castro introduce el término al hablar
de los historiadores que plantean una identidad nacional establecida antes
de la llegada de "pueblos invasores". Para estos historiadores la identidad
nacional surge como amalgama de las culturas celta e ibera, pueblos que
poblaban la península antes su romanización. La identidad
celtíbera sería autóctona y nacional, por tanto;
las demás, foráneas, ajenas. Será fácil
ver cómo se pueden confundir nociones de pureza e impureza, ortodoxia
e heterodoxia, con esta conceptualización de la "esencia" española.
También será fácil ver cómo este término
señala una coordenada ideológica y cultural diametralmente
opuesto al que Gonzalo Ansúrez (hermano de Lucila) representa.
En esta página podrás ver la supuesta primitiva cultura celtíbera en su contexto histórico |
|
- El niño, insomne y enfermo, sueña con la guerra. ¿Por qué inserta Galdós esto en medio de todo?
- La figura de Gonzalo
Ansúrez (hermano de Lucila, cuñado de Vicente Halconero) que
"se ha hecho moro" va a ser fundamental más adelante. ¿Qué sabemos de él aquí?
- ¿Quién es Jacob Méndez?
- Se sigue viviendo la dramática situación política dentro de la casa de los Ansúrez. La "guerra contra los moros" se enfoca desde distintos puntos de vista, empezando con la conversación entre Vicentito y su madre, Lucila, y terminando con el coloquio entre los mayores, con la llegada de un personaje central: Juanito Santiuste.
- Analiza cómo Galdós amplia la perspectiva juvenil idealizadora frente a la idea de una hazaña bélica heróica:
"Halconero le consolaba con la promesa de traerle una colección de vistas de batallas que, puestas dentro de una caja negra, se miraban por un cristal de aumento, y ello resultaba como si estuviese uno en medio del campo de acción viendo pelear a moros con cristianos. Era la campaña de los franceses en Argel, en láminas iluminadas, que parecían la verdad misma, todo muy propio y con su color natural. Con esto se fue sosegando el chico y resignándose a la quietud." |
|
Representación de una batalla
entre soldados de ploma
españoles y marroquíes |
- Antes de llegar Juanito Santiuste, este personaje se presenta en la conversación entre madre (Lucila) e hijo (Vicentito). Santiuste, periodista, se caracteriza como "cantor de historias" y como un "loco."
TOMA NOTA: "Cantar" en este sentido sirve como nexo a la tradición épica clásica y, especialmente, al tema del heroísmo, un tema fundamental en la novela de Galdós. Homero (la Ilíada y la Odisea) y Virgilio (la Eneida) "cantan" en griego (aquel) y en latín (este) las proezas y las hazañas del héroe por antonomásia de la cultura griega, Ulise, y de la latina, Eneas.Virigilio inicia su epopeya (poema épico) con la frase, en latín: "arma virumque cano" ("canto las armas y el hombre..."; "I sing of arms and the man..."). Como lectores de la novela de Galdós, estas y muchas más referencias nos instan a entender el mensaje que el novelista intenta transmitirnos acerca del heroismo, patriotismo, nacionalismo en el momento en que escribió Aita Tettauen: 1905. |
|
|
|
Protadas de la Ilíada de Homero y la Eneida de Virgilio; representación de la batalla entre Aquiles y Héctor (Ilíada), sobre una cerámica griega antigua |
- Leoncio Ansúrez (hermano
de Lucila) quiere que su mujer, Virginia, vaya a vivir con Lucila Ansúrez
y Vicente Halconero. ¿Por qué?
NOTA CULTURAL / Berberisco,
Berbería (o "Barbary", as in the "Barbary Coast" or the "Pirates
of Barbary): Estos términos derivan
del nombre que los árabes dieron antiguamente a los pueblos que
vivían hacia el oeste, en relación a Arabia, en lo que es
hoy el Magreb (Tunisia, Argelia, Marruecos). El término se relaciona
también con el nombre del pueblo beréber (los beréberes),
indígena al noroeste del continente africano. En su origen, "berbería"
(en árabe) probablemente se utilizó para imitar los sonidos
(el habla) no comprensibles (por los árabes) de esta gente. En este
sentido, se parece a la palabra en castellano "algarabía" (semejante
a "al-árabe"), que significa una gritería confusa e incomprensible.
- Con la llegada de Juanito Santiuste, después de la cena, la discusión política arrecia (cobra fuerza y vigor).
- Analiza la conexión entre periodismo y política, y otros aspectos del perfil de Santiuste, que Galdós plantea en este pasaje:
"Santiuste, después de mil peripecias en su romántica y azarosa vida, había vuelto a las primitivas aficiones literarias. La realidad le hizo ver que no le llamaba Dios por el camino de la herrería mecánica, y que mejor que armas de fuego, construiría poemas, cuentos y artículos de periódico. El mismo Leoncio, que le había tomado grande afecto, le empujó hacia el sendero angosto de las letras, que entonces empalmaba con el ancho camino de la política."
- ¿Qué anticipa Galdós en las siguientes citas"
"[Santiuste], como periodista, solía llevarlas frescas, y cuando no las tenía, las inventaba, llegando a creer en conciencia que eran la verdad pura. . . ."
"Luego [Santiuste] tomó la flauta, y dijo: «¡Qué hermoso espectáculo el de un pueblo que antes de ver realizadas las hazañas y a las da por hechas! Lo que la Historia no ha escrito aún, lo ve la Fe con sus ojos vendados. Creer ciegamente en el fin glorioso de la campaña, equivale a la realidad de ese fin. Ved cómo las madres pobres de las aldeas no se afligen de ver partir a sus hijos para el África. Oíd a los viejos, que, como Horario, pronuncian el terrible ¡que mueran! . . . ¡Espectáculo admirable, sublime, que nos consuela de las vulgaridades y miserias de la política!»"
- ¿Qué sugiere la progresión musical --flauta, cornetín, trompa-- que Galdós incorpora como metáfora?
- ¿Qué consiguió el "político muy ladino" (crafty, sly), Leopoldo O'Donnell?
- ¿Qué significa que el progreso haya tenido un impacto sobre el pensamiento popular de las masas?
- ¿Cómo figuran los
conceptos de "ultraje", "vilipendio" y "honor nacional" en la representación de la psicología colectiva/popular?
- Presta atención también
a las referencias a las figuras asociadas con la España imperial
(Carlos V), la Inquisición (Cisneros) y con la Reconquista de Granada
(la "santa Reina" = Isabel la Católica).
- Comentar: "La epopeya, que habíamos
relegado al Romancero, vuelve a nosotros . . . y con gallardo atrevimiento
y ambición religiosa y política nos señaló
el Africa como remate y complemento del solar español. . . . Del
Pirineo al Atlas, todo será España" (24).
- ¿Cómo plantea Galdós la idea --nacionalista, imperialista, conservador-- de que la invasión de África en 1859 podía verse como la continuación de la reconquista medieval?
- En su descripción final, Galdós plantea la cuestión de la geografía mientras reflexiona sobre la frontera que divide España y Marruecos, Europa y África, el estrecho de Gibraltar. ¿Qué teoría general acerca de las fronteras podríamos sacar de este pasaje?
"Al volar desde este mundo al Cielo, donde la esperaba el premio de sus virtudes, Isabel ordenó a sus herederos que arrebatasen a la Media Luna el suelo mauritano, español suelo, y formasen el futuro reino de España con los extremos de los dos continentes. El bravo mar que entre ellos corre no los enemista y separa, sino, antes bien los une y acaricia, besando ambas orillas con alternados ósculos, y cambiando entre una y otra signos de paz y amor. Del Pirineo al Atlas,todo será España»."
- Durante la "tertulia" familiar
(cap. IV), Santiuste y Carrasco plantean las diferencias entre la cultura
"mora" y la "cristiana", enfocándose en la moda (25). Relaciona
este discurso con las teorías lingüísticas (las lenguas semíticas versus las lenguas indo-europeas)
comentadas por Edward Said.
- Gran parte del capítulo
V ocurre de noche, mientras el "insomnio revolvía historias pasadas
y presentes" en la imaginación de quien (Lucila) no conciliaba el
sueño. Sobresale en la pantalla de su imaginación la imagen
del niño ante la guerra, que idealiza (cual si fuese un Quijote
moderno) las hazañas épico-militares: "El ideal guerrero
tan pronto revivía en los ojos del niño doliente [Vicentito]
como en los labios de aquel otro niño grande [Juanito] que jugaba
con el Romancero" (30). En Lucila Ansúrez Galdós retrata
a una madre ansiosa por proteger a su hijo (Vicentito) de la realidad militar.
- "Entrando noviembre, todo Madrid
repetía en variedad de formas el juego de guerra de los niños
de Halconero" (31): la narración gira aquí, pasando del caso
singular (la familia Halconero Ansúrez) al colectivo (la sociedad
española). Se trata de un ejemplo a grande escala de sinécdoque (la parte por el todo: la familia = Madrid = España), tropo que es fundamental en las novelas de Benito Pérez Galdós
y en muchas novelas históricas. Trata de ir comprendiendo las implicaciones
temáticas de esta comparación.
Tropo: (Del lat. «tropus»,
gr. «tropos», vuelta, melodía, de «trepo»,
dar vuelta, guiar; v.: «trepidar, trofeo, trovar; intrépido;
alotropía, geotropismo, heliotropismo, heliotropo, treponema, tropeoleo;
zoótropo».) Figura retórica que consiste en el empleo
de una palabra en sentido figurado.
Sinécdoque: (fem.). Metáfora
que consiste en designar una cosa con el nombre de otra que no es más
que una parte de ella («el pan» para designar los alimentos);
o con el de la materia de que está hecha («oro» para
designar el dinero); o con el de algo que lleva o usa («faldas»
para referirse a las mujeres); etcétera.
- Se propone aquí que la guerra
es un pretexto por motivos que nada tienen que ver con Africa. Explicar
(31-32).
- El infarto (¿?) de Vicente
Halconero ante la noticia de Juanito Santiuste (que se va a la guerra:
36) marca el comienzo de una yuxtaposición (velorio en casa, patriotismo
en la calle) que resulta tajante al comienzo del capítulo VII: "subían
el ataúd [de Halconero] . . . gran estrépito militar venía
de la calle" (42). Tales estrategias (es decir, esta yuxtaposición)
son literarias obviamente. ¿Qué podría tener en menta
Pérez Galdós a la hora de crearla? ¿Qué quiere
señalar?
- La estrategia literaria de proyectar
la situación colectiva mediante la perspectiva individual culmina
en el capítulo VII. El cuadro de Madrid y las multitudes sirve de
telón de fondo para la nueva aventura de Juanito Santiuste, quien
procede a la estación de Atocha para coger el tren y viajar con
las tropas a Marruecos. El tren es un símbolo importante a finales
del siglo XIX entre los autores realistas y naturalistas (Galdós,
Clarín, Pardo Bazán; en Inglaterra, Thomas Hardy). Trata
de pensar en lo que podría simbolizar aquí.
SEGUNDA
PARTE: Africa.--De Ceuta al Valle de Tetuán: noviembre y diciembre
de 1859.--Enero de 1860
CAPÍTULO I
- Clavileño es el nombre de
un caballo de madera que aparece en el capítulo XLI de Don Quijote
de la Mancha. Como sabemos, con Don Quijote Cervantes construye una parodia de la caballería andante (knight errancy), del heroísmo correspondiente y de los libros medievales ("libros de caballería") que lo representan. Dentro de los esquemas paródicos de la novela de Cervantes, Clavileño --lo mismo que "Rocinante" (el caballo de don Quijote) sería la proyección burlesca de los caballos que los héroes de antaño, los cuales ascenían al heroismo idealizado gracias a su proeza y su nombre. El caballo del Cid, por ejemplo, se llama Babieca.
|
|
|
Representaciones de Clavileño a través de los siglos |
- En su llegada a Marruecos, Santiuste
sirve como pretexto para trasmitir una perspectiva global de las primeras
batallas de la guerra. Presta atención a la manera en que Galdós
describe a la "morería" y trata de compararla con ciertos cuadros
del périodo, sobre todo los de Mariano Fortuny en Los
pintores del siglo XIX ante la historia. Otros cuadros que pueden
relacionarse son: Gonzalo Bilbao Martínez (1860-1938), "Tetuán
/ Corriendo la pólvora"; Francisco Lameyer Berenguer (1825-1877), "Combate
de moros"; Eduardo Rosales Gallina (1836-1873), "La
batalla de Tetuán". Nota en particular la retórica
en las siguientes descripciones: "vomitó Sierra Bullones gran morisma
. . . daba el cuerpo los berberiscos con espantosa gritería . .
. los moros salían por aquella parte como nube de moscas (etc.)"
(51-52).
CAPÍTULO II
- Identificado como el cantor o cronista
de la guerra, Juan Santiuste sirve como una especie de cámara que
capta la guerra en su dimensión panorámica. La batalla, la
violencia y el odio parecen servir como acicate para su conciencia pacifista
y humanitario. También suscitan en Juan inquietudes religiosas,
algo frecuente entre los seres humanos en tiempos de crisis. Sigue este
proceso (capítulos II - IV) mientras pasamos del plano colectivo
al individual.
- Nota la crítica implícita
de las fronteras religiosas entre la Cristiandad y el Islam levantadas
en torno a la imagen del "apóstol Santiago . . . general de españoles
y matador de moros" (56). El capítulo II termina con la imagen de
Santiago apóstol otra vez, y modelo preestablecido que resulta útil
para Galdós.
CAPÍTULO III
- Coordenadas geográficas:
estas primeras campañas nos conducen hacia la ciudad de Tetuán (consultar mapa).
- Presta atención a la descripción
de los heridos de guerra en el hospital (otra vez, Santiuste es nuestro
telescopio). ¿Cómo describe Galdós esta escena? ¿Podríamos
suponer aquí alguna motivación?
- Al final del capítulo III,
Santiuste se encuentra con Pedro Antonio de Alarcón (1833-1891),
un importante escritor granadino del siglo XIX, autor de "El Sombrero de
tres picos" (que inspiró un importante ballet de Manuel de Falla)
y que publicó también su Diario de un testigo de la guerra
de Africa. Según un crítico, "[la guerra de Africa] parecía
a Galdós, no sin razón, una pequeña aventura guerrera,
una imitación del cesarismo francés . . . que despierta en
Alarcón su «nacionalismo épico»". Sigue la dialéctica
que se desarrolla aquí (capítulo IV) entre la actitud de
Alarcón y la de Juan Santiuste.
|
La toma de Tetuan (estampa popular de la época) |
|
|
|
De izquierda a derecha:
Foto de Pedro Antonio de Alarcón;
portada de su Diario de un testigo de la Guerra de África;
conmemoración filatélica (de la época) de la Guerra de Africa |
CAPÍTULO IV
- El papel de Juan Santiuste sirve
para plantear el papel del arte y de la literatura --del artistas, de los
intelectuales-- ante los hechos históricos. Trata de formular ideas
al respecto. Ten en cuenta la siguiente declaración: "en el fondo
todo de esto no hay más que un plan político: dar sonoridad,
empaque y fuerza al partido de O’Donnell" (69).
- En el diálogo entre Juanito Santiuste y Pedro Antonio de Alarcón, analiza las diferencias ideológicas que separan a estas dos figuras. ¿En qué se basan estas diferencias? ¿Qué ideas los separan?
- Figuras políticas que aparecen nombradas en esta sección:
- Leopoldo O'Donnell, Presidente del Gobierno quien declaró la guerra contra Marruecos el 22 de octubre de 1859
- Emilio Castelar, político republicano que apoyó la guerra "'en defensa del progreso y la civilización,' destinos confiados por la Providencia a la 'gran nación' española hasta entonces 'postrada y vencida'". Esta postura, de la izquierda, contrastaba con el apoyo de la derecha sobre bases religiosas. (Ver: Francisco Javier Paredes Alonso, Historia contemporánea de España: Siglo XX, pág. 246)
CAPÍTULO V
- Nota la manera en que Galdós
proyecta posturas colectivas (populares) hacia los "moros": "el impío
desprecio con que se mira a los pobres moros. Nuestra lengua es una hoja
bien afilada para cortar cabezas mahometanas"; "Así le sale historia
de España lo que debiera ser historia marroquí… Perico [Pedro Antonio de Alarcón], moro
de Guadix, eres un español al revés o un mahometano con bautismo…
Escribes a lo castellano, y piensas y sientes a lo musulmán… Musulmán
eres…. El cristiano soy yo" (72).
- Nochevieja de 1959. En este capítulo
vamos dándonos cuenta de que Galdós fabrica un personaje
literario (Juan Santiuste) y su encuentro con un personaje histórico
(el escritor Pedro Antonio de Alarcón) para contrastar posturas
ideológicas. Explicar.
- La Casa del Morabito: un lugar mencionado como escenario de batalla entre las tropas españolas y los marroquíes. Un "morabito" es una especie de ermitaño (hermit) religioso, dedicado a la vida retirada y a la oración.
|
|
|
Morabitos en diferentes zonas de Marruecos |
CAPÍTULO VI
- Batalla, el 1º de enero de
1860. Nota la brutalidad contra los marroquíes y el tema del delirio
(la demencia, 76) de la guerra.
|
Imagen
de un húsar:
soldado de caballería ligera que
iba vestido a la húngara (Siglo XIX).
|
- Trata de evaluar la manera en que
Galdós describe este encuentro militar. ¿Es que pueden identificarse
señales de cierto pacifismo en la retórica de Galdós?
- Motivo (80): la "diosa implacable",
sedienta de sangre / la guerra como rito sacrificial. ¿Puede servir
este motivo para establecer cierto paralelo entre el autor y su protagonista?
¿Qué conexión podría hacerse aquí entre
este motivo y las multitudes madrileñas, descritas al comienzo de
la novela, cuando Juan Santiuste se dirigía hacia la estación
de tren?
- Nota el énfasis en la perspectiva
de Santiuste, su acto de ver: "vio una fila de soldados conductores…",
etc. (81).
CAPÍTULO VII
- Santiuste sustituye a un camillero
(stretcher-bearer; 'camilla' = stretcher) y descubre que el herido que transporta es Leoncio Ansúrez.
- Santiuste se conmueve ante la realidad
de la tragedia española: heridos, muertos, autoridad militar (El
general Prim).
- Leoncio cree haber visto a "su hermano moro," Gonzalo
Ansúrez, morir en la batalla recién librada. Sin embargo, la manera en que se relata este episodio sugiere que las impresiones de Leoncio pueden ser inseguras. No menos inseguras son las impresiones de Juan, que cree haberlo visto a Gonzalo sin haberlo conocido nunca. Se afianza en el parecido de Gonzalo con su hermana Lucila (madre del niño, Vicentito, en Madrid). Tanto Leoncio como Juan fundan su interpretación de los hechos sobre datos poco fiables.
CAPÍTULO VIII
- El narrador resume el proceso psico-ideológico
de Juanito Santiuste: "El radical cambiazo en los sentimientos y en las
ideas de Santiuste, llevándole del nacionalismo épico a las
amplias miras humanas…" (89).
- El violento temporal y sus efectos
sobre las tropas españolas.
- Durante un delirio febril se representa
la conversión de Juanito Santiuste. La conversión es un tema
fundamental en el discurso orientalista español, desde el Romancero
medieval hasta el novelista Juan Goytisolo (Don Julián).
Piensa, por ejemplo, en el romance "Tres morillas." Trata de formular una explicación de los postulados ideológicos
en que este motivo se basa.
|
|
El General Juan Prim en la batalla de Castillejos |
El General Juan Prim en la batalla de Tetuán |
CAPÍTULO IX
- En el movimiento desde Ceuta hacia
Tetuán hay peligro y los soldados necesitan víveres.
- Primera mención de Muley el Abbás, comandante de las tropas marroquíes
- Galdós aprovecha su representación
del consejo de guerra de los generales para abrir una ventana sobre la
mentalidad militar. Su perspectiva sobre "la morisma": el delirio de los
musulmanes, que se remonta al mismismo profeta, "que se volvió tonto,
quizás por bebedizos" (97).
- Vocabulario: "morisma"
= conjunto o multitud de moros.
CAPÍTULO X
- Mientras los soldados españoles siguen
esperando la llegada del barco con víveres, Juan Santiuste, horrorizado
por los estragos de la guerra, sueña con Lucila y Vicentito y teme
regresar a España sin ser reconocido como héroe.
- NOTA ESTILÍSTICA: Toma nota de
la precisión cronológica del relato de Galdós.
Referencias a las fechas (e.g., “el día 10 llegó de Ceuta
Perico Alarcón en el vapor Barcelona…”, 101), como la inclusión
de personajes históricos (e.g., el escritor granadino Pedro Antonio
de Alarcón) establecen una especie de marco histórico, contribuyen
a la confusión de historia y ficción y son un rasgo fundamental
de la novela realista decimonónica.
- Pensamientos pacifistas de Juan Santiuste: “No hay caudillos que arrastren a los soldados a las hazañas pacíficas... No sé en qué consiste que el patriotismo es casi siempre un sentimiento guerrero; no concebimos la patria sino incrustada en la idea de conquista; no pronunciamos su nombre sin que en el aire repercuta con son de trompetas y tambores” (101). Compárese con otros comentarios acerca de la idea de la patria: “Puesta a un lado la flauta, cogió Santiuste el cornetín, y tocó estas cláusulas vibrantes: ‘El ideal de la patria se sobrepone a todos los ideales cuando el honor de la nación está en peligro. . . .’” (23-24).
- Analizar: “Los actos heroicos resultaban los mismos en todas las narraciones...” (103). ¿Es que Santiuste tiene conciencia de la “textualidad” del heroismo? ¿Qué relación se plantea aquí entre prácticas literarias y conciencia patriótica (heroica)?
- Curiosa la yuxtaposición de este párrafo y el siguiente (“Con todo su cariño y amenidad no lograba don Toro Godo aliviar las melancolías de Santiuste, ni curarle del terror que le infundía los cadáveres, así de cristianos como de agarenos” (103). ¿Cómo se desarrolla el conflicto que Santiuste siente en torno al tema de la patria en sus sueños siguientes, con Lucila y Vicentito Halconero (104)?
CAPÍTULO XI
- Juan Santiuste y Toro Godo, paseándose
por la tarde, hablan de varios temas, especialmente el celibato (eclesiástico
y militar). Su paseo termina con una vista panorámica sobre el valle
de Tetuán.
- Otro ejemplo de la perspectiva panorámica,
que Galdós insiste en relacionar con Juan Santiuste
- Comentar: “Así, el alma desconsolada de
Santiuste veía en sí misma el deslucimiento de las glorias
guerreras, como colores que se desleían y rayos de sol que se mojan”
(109). Estos sentimientos “crepusculares” de Santiuste, ¿podrían
tener algún simbolismo político para Galdós? ¿Podríamos
relacionarlos con alguna actitud implícita hacia los códigos
militares, el patriotismo, el heroísmo, la caballerosidad?
- Identifica los elementos que sirven para representar Tetuán como un premio sin par para el ejército español. ¿Por qué crees que Galdós caracteriza Tetuán como tan deseado y deseable objeto de conquista?
- Analizar: “Así, el alma desconsolada de Santiuste veía en sí misma el deslucimiento de las glorias guerreras, como colores que se desleían y rayos de sol que se mojan” (109).
CAPÍTULO XII
- Los soldados comentan la llegada de mujeres en
el vapor Barcelona, además de comida. Pedro Alarcón
confía un fardo para que Juan Santiuste lo lleve a una persona en
Madrid. Juan Santiuste sueña otra vez con Lucila, que llora…
¿por la muerte de la épica?“
- Lo que entonces dijo Lucila [en su sueño] fue para Santiuste como si un rayo cayera sobre su cabeza... Des estremecimiento despertó, quedándose un mediano rato entre la realidad y el sueño. Despierto y alucinado aún, decía: «Yo no le he matado, Luci... se ha venido abajo el castillo de la epopeya, y si al caer todo ese matalotaje quedó Vicentito enterrado entre los escombros, no es culpa mía, Lucia... Yo no derribé el castillo vetusto... se cayó él solo... porque quiso caerse...»” (113-14)
CAPÍTULO XIII
- Juan Santiuste se disfraza ya de moro (chilaba,
babuchas) y así trata de llegar a la Aduana. Por el camino
encuentra a unas mujeres marroquíes con niños, quienes le
pedrean, y un grupo de judíos sefardíes (se les nota por
su español arcaico).
- Presta atención a la descripción
de las personas que Santiuste encuentra por el camino.
- Presta atención al habla de los sefardíes.
- Comentar: el punto culminante de la 2ª parte
de la novela = la entrada de Juan Santiuste, el pacifista, en la “poética
Tettauen” (=Tetuán), nombre que significa “Ojo de manantiales”.
- Analizar la primera representación de personas árabes (marroquíes): las tres “moras” que Juan encuentra en su camino hacia Tetuán (116)
- Analizar el lenguaje de las tres judías (117)
- Tres moras, tres judías: ¿numerología? ¿simbolismo? ¿mito? ¿arquetipo?:
- cfr. el romance medieval “Las morillas de Jaén” (cantada aquí por Françoise Atlán): http://agonzalez.web.wesleyan.edu/span254/canciones_atlan.htm
TERCERA PARTE: Tettauen, mes de rayab de 1276
CAPÍTULO I
El subtítulo de este apartado
señala un cambio repentino en la narración que poco a poco
iremos comprendiendo. (Sólo se comprenderá totalmente
al final de la novela.) Se trata, en teoría, de la crónica
de la guerra escrita por el Nasiry (nombre completo: el Hacha Mohammed
ben Sur el Nasiry), renegado español (o muladí) y hermano
de Lucila Ansúrez (nombre original: Gonzalo Ansúrez) mencionado
al comienzo de la novela. El relato se adapta ahora al formato epistolar,
pues los capítulos se estructuran como si fueran las cartas escritas
por el Nasiry a un benefactor suyo que vive en Fez y que quiere enterarse
de lo que ocurre en el frente.
- NOTA CULTURAL: 1276 del calendario musulmán
corresponde (obviamente) a 1860 de la era cristiana. Sobre la hégira
(el comienzo de la era islámica y el calendario musulmán),
consulta la Enciclopedia
Britannica online
- VOCABULARIO: Muladí = (Del ár.
«muwalladín», pl. de «muwállad»,
participio de «wálad», adoptar. Adj. y n.); se aplica
a los cristianos que, durante la Reconquista, se hacían musulmanes
y vivían entre los moros.
- ¿Cómo relaciona Galdós la
religiosidad musulmana con el espíritu guerrero de los marroquíes?
- A partir de este momento el autor irá
incluyendo varios elementos costumbristas, quizá con intenciones
didácticas o simplemente para crear un ambiente al parecer auténticamente
oriental: por ejemplo, (1) comenzar el relato alabando a Dios (Allah) o
(2) las referencias a la música árabe (“los dulcísimos
acordes de las chirimías, pitos y tambores”, 124).
- Nota la relación que se establece entre
la religiosidad y el espíritu guerrero en diferentes momentos del
relato. Ejemplo: “no sólo practica la oración mañana
y tarde a las horas que marca la ley . . . alternando en la matanza y en
el rezo” (120). La referencia a “los infieles” en “ridículos
preparativos” sirve, se supone, para proyectar una perspectiva, como si
dijéramos, desde allá hacia acá.
- Compara esta descripción de los jinetes marroquíes, ofrecida por el Nasiry, con el cuadro de Fortuny, "La carrera de pólvera":
“¡Qué hermosa carrera la de tantos hombres a caballo, enardecidos y locos de ira contra la usurpación! Caballo y jinete parecían en cada de una sólo de una sola pieza, y en ésta un corazón ardiente irradiaba el fuego de la pasión guerrera. Nunca vi caballería más fiera y gallarda. ¡Loor ... ! La paz sea con el que sigue el buen camino.”
Notar: "correr la pólvora" = Ejecutar varias maniobras corriendo a escape a caballo y disparando las armas, ejercicio muy usado por los moros como diversión o festejo. (Diccionario de la Real Academia Española)
CAPÍTULO II
El Nasiry inicia este capítulo refiriendo su diálogo con el "noble y sabio príncipe," su benefactor en Fez. Este le implora que vaya a Tetuán ("Ojos de Manantiales") para analizar los efectos de la guerra: el supuesto "pillaje y saqueo" de los guerrilleros rifeños; los esfuerzos "traicioneros" de la comunidad judía, sefardíes todos (descendientes de los judíos expulsados de España en 1492), que según parece buscan el amparo de las tropas españolas. En
el Mellah (el barrio judío), el Nasiry habla con Yakub Mendes, un comerciante judío, acerca de la amenaza del
saqueo y pillaje de las tropas españolas, y luego con su amigo Simuel Riomesta, incitándoles (según cuenta) para que no traicionen a Marruecos. La viuda Mazaltob ("Afortunada") le cuenta su experiencia con el "mancebo ferido" (joven herido): obviamente es el episodio de la herida de Juan Santiuste, contado al final de la Segunda Parte de esta novela a través de otra voz narrativa, la del narrador omnisciente, y desde un punto de vista diferente (el de Santiuste).
Mazaltob le acompaña a Nasiry adonde Juan, "disfrazado" todavía, está convaleciendo.
Tetuán en imágenes: la Puerta de Dios (Bab-el-lah), entrada al Mellah, la judería (barrio
judío), ayer y hoy
- Presentación de la judía Mazaltob
(Afortunada), famosa hechicera, que ejercerá un papel importante
en la historia. Su caracterización corresponde grosso modo
a la de la mítica Celestina, protagonista de una de las obras maestras
de la literatura española (Fernando de Rojas, La Celestina, 1499). La Celestina es la mítica hechicera que utilizó sus poderes
de la nigromancia y la magia para facilitar relaciones sexuales.
De Rojas fue un judío converso que vivió en Toledo en la
época de la Inquisición.
- Motivo: O´Donnell (el famoso militar español
de origen irlandés) y el antisemitismo europeo (128)
- Pasajes, motivos y temas:
- La representación de los judios: Yakub Mendes, “traficantes en piedras preciosas” (128); Tamo y Noche, “dos hebreas muy guapas” que viven con su padre un un “tugurio” (129); Mazaltob, “traficante en bálsamos,” “hechicera o mágica” que “ en su juventud fue . . . más cautivante por sus decires agudos que por su hermosura” (129).
- Los “rifeños” y su violencia perpetrada contra el Mellah (129).
NOTA HISTÓRICA / CULTURAL: El Rif es el nombre del norte montañoso de Marruecos. La guerra en cuestión, que estalla en 1859 se denomina en España la «Guerra del Rif» o la «Guerra de África» (ver introducción, arriba). Obviamente, los «rifeños» son soldados marroquíes caracterizados aquí por su violencia y barbarie. En el contexto histórico estos «rifeños» deben entender como una especie de milicia más que ejército oficial: defendían la soberanía nacional (marroquí), pero se movían con bastante autonomía. Las tensiones entre el gobierno central marroquí y la población es una de las tensiones constantes en la historia política y social interior del país.
Fotogalería de los soldados rifeños recogida desde la prensa española:
- El profeta cristiano Yahia, hijo de Zacarías: El Nasiry asocia a Santiuste con él ya que “Yahia” es el nombre equivalente a Juan (San Juan) en árabe (130-31)
- La representación del Mellah: “oscuro pasadizo,” “patio sucio y ahumado” (130).
- Mazaltob es la que le da socorro y protección a Santiusta, es la que le introduce en Tetuán. ¿Simbólico?
CAPÍTULO III
Para captar la complejidad de este capítulo, conviene recordar que el texto se presenta con el testimonio epistolar del Nasiry, para su benefactor, el príncipe marroquí que vive en Fez. Piensa, por ejemplo, en cómo insiste en llamar a los judíos del Mellah como una "caterva" (gang o bunch, despectivo). Por eso las referencias a la familia Ansúrez y a la identidad española del Nasiry (Gonzalo Ansúrez) están "disfrazados" en la narración. Identifica dónde y cómo. ¿Crees que Nasiry es sincero en todo lo que relata? Intenta formular una opinión, basándola en datos concretos.
Juan Santiuste (bautizado con el
nombre hebreo “Yahia”) le explica al Nasiry la razón de su pacifismo. El Nasiry, mientras tanto, quiere saber más sobre los "planes de O'Donnell." Juan (Yahia)
vaticina la victoria de O’Donnell, lo cual provoca la furia del Nasiry: "¡Loor al Dios únmico! Comprenderás, noble señor, cuánto me indignó el vaticinio del desquiciado Yahia" (133).
En casa de Simuel Ríomesta, encuentra a su hija Yohar (Perla). El padre se ha reunido con otros judíos en la sinagoga para tratar el tema de la guerra. Yohar le explica que Muley el Abbás ha prohibido que
la población tetuaní (= de Tetuán) se fugue ante el
peligro de la invasión española.
Por las calles de Tetuán encuentra a su "convecino Hach Ahmed Abeir," quien opta por hablarle en español. Este le expresa su temor a los rifeños y le recomienda al Nasiry que intente "apaciguar a los judíos."
Por eso vuelve al Mellah, según informa en su epístola, donde topa con Mazaltob. Ella reitera
su profecía (la victoria española el día 18 de schebah),
mientras que el borriquero, Edras Molina, proclama que la pólvora
de los españoles no arderá tan bien como en España
debido a la diferencia de aire. (¿Quién sabe si con esto
Galdós quiere implicar algo?)
El Nasiry termina esta carta con una
sentencia religiosa: la necesidad de una intervención divina para
que las naciones no hagan guerra. “Los beneficios de Dios no se manifiestan
en las naciones, sino en el universo…” (137).
- El tema de la convivencia, la "España de las tres culturas" o "castas," o los "hijos del Libro":
- Toma nota de las referencias a los lazos bíblicos entre musulmanes y judíos, comentados por Mazaltob (131) y a la hermandad hispano-marroquí,
que se basa en el concepto de que judíos, cristianos y musulmanes
son “hijos del Libro” (unidos en su monoteísmo) : “el lazo hermandad
. . . Todos los que adoramos un Dios único y le tememos, vamos a
Ti, Señor, y entraremos en los jardines de inefables delicias”;
“no ha llegado el tiempo en que nos convenzamos los hijos de Adán
del desvarío de las guerras” (132)
- Toma nota de cómo se van formando tres grupos –los “cristianos” bajo O’Donnell (que llegan), los árabes (que defienden) y los judíos del Mellah—en el mapa político-militar tal y como Galdós lo representa.
- La representación de Mazaltob, mujer celestinesca, y el mundo habitada por ella:
- sus “inmundos hechizos, ”“pasadizo estrecho,” “manos crasas,” “artimañas sacrílegas,” su “tableta con sinfín de rayas y garabatos” (134);
- “embaucadora” y “nigromántica” con un “hebreo revejido, sarnosa y casi enana” que la sirve (Esdras Molina) (136).
- El tema de la identidad, con sus dos motivos principales: el disfraz y la conversión. ¿Cómo identificarlos e interpretarlos?
- El testimonio, la crónica, el parte (informe) de la guerra:
“Copia fiel [¿?] de la opinión de la gente” (que el Nasiry transmite a su benefactor), los “infieles” (final, 137) y la declaración de pacifismo y hermandad entre las naciones: “«Si Dios no contuviera a las naciones unas con otras, la tierra sería corrompida. Los beneficios de Dios no se manifiestan en las naciones, sino en el universo...»” (137): ¿señales cruzadas? ¿decepción?
- NB: "Yahia" es el nombre hebreo por San Juan Bautista, hijo del sacerdote y profeta Zacarías. Según Lucas (3:1-3), Juan comenzó a predicar y a bautizar en el desierto. Se considera precursor de su primo, Jesucristo, a quien bautizó.
CAPÍTULO IV
El Nasiry un vuelve a la casa de Simuel Riomesta para pedirle le pide un préstamo. (El tópico del judío
prestamista o usurero.) La hija de Riomesta, Yohar, le acompaña
al cuarto donde están las arcas. Lo que al principio parece
una escena costumbrista de cortejo entre el musulmán (Nasiry) y
la judía (Yohar) se convierte en una pequeña lección
histórica (tendencia didáctica) acerca de la comunidad judía
en África y sus lazos ancestrales con España, país
donde se “quemaron” a los “abuelos” de Yohar (según el Nasiry).
El Nasiry fracasa al final en su intento de convencerla del peligro español
a “aquella gente sin el fuego de patria en su corazón” (así
caracteriza el Nasiry al pueblo judío).
Saliendo de la casa de Riomesta, el Nasiry se cruza con Mazaltob. Sus advertencias (que Yohar no sucumba a los artilugios hechiceros de esta nueva Celestina) son una premonición de la relación que Yohar y Yahia concertarán luego.
Abandonando el Mellah, el Nasiry
se dirige a la Alcazaba (fortaleza) y luego al Zoco (zona comercial, mercado),
donde ve a las multitudes alteradas por la amenaza de guerra. Visión
panorámica que recuerda la de Juan Santiuste cuando cruza Madrid
camino de la estación de trenes, al comienzo de la novela.
- Galdós, historiador de la España de las tres culturas": analiza con cuidado las referencias históricas y culturales en estos pasajes, donde Galdós plantea el tema de Al-Ándalus y su relación con Tetuán. En el primero, los lazos corresponden a la comunidad judía. En el segundo, replantea la expulsión de los moriscos y sus descendientes aún vivos en el norte de Marruecos.
"Luego, respondiendo a mis exhortaciones para mantener la fidelidad al Mogreb y la confianza en su fuerza, [Simuel Riomesta] me dijo que los judíos, o no tienen ninguna patria, o tienen dos, la que ahora les alberga y la tradicional: ésta es España. De allá provienen él y los suyos: su antecesor Abraham Riomesta, había sido recabdador (tax collector) de las alcabalas y tercias reales en la aljama de Talavera. Verdad que de allí se les echó, y algunos de su propia familia fueron quemados públicamente, otros quedaron en Castilla con el nombre de conversos o marranos... Pero de entonces acá, ya no había en España inquisidores ni tostamiento de personas. «Onde que por ellos» ya no tenían los hebreos rabia contra españoles, ni miraban «como enemiga dañante la potestanía de España»" (140-141).
"En Samsa me hospedó mi grande amigo Mohamed Requena, anciano de luenga barba blanquísima, . . . Pertenece a la nobleza tetuaní, y en su casa conserva las llaves de la que en Granada ocuparon sus antecesores, hasta que Isabel y Fernando (¡a quienes Allah dé su merecido!) les arrojaron con Boabdil a las playas africanas" (143)
- VOCABULARIO: Aljama (final, 140) = comunidad
de moros o judíos. Américo Castro analiza este término
en relación a muchas ciudades en España, que lo conservan
en su nombre (ej.: Alhama de Aragón).
- Nota las referencias a los “autos de fe” (procesos
legales contra herejes en el siglo XVI), conversos y marranos.
- VOCABULARIO:
marrano = (1) se aplicaba al judío converso que seguía
practicando su religión en secreto; (n.; ant.); (2) persona maldita
o excomulgada.
- Nota el efecto coral que se produce al transmitir
múltiples voces a través de la correspondencia (voz única)
del Nasiry.
- La últimas de esas voces (hasta ahora) pertenece
al viejo sabio, Mohammed Requena, “anciano de luenga barba blanquísima”
que recuerda la imagen del viejo sabio en Aben Humeya (Muley Carime, el
Alfaquí) y en el romancero. Sería fácil ver en estos seres, que mantienen viva su conciencia de la patria (España) perdida, el tema de la nostalgia y del destierro.
- Tema importante: la interpretación de
la historia en relación a las Santas Escrituras como signo de una
actitud musulmana. (Ejemplo: “pensé en el día del juicio…”,
143).
- Tema: La “autenticidad” sigue señalándose en interminables referencias a (por ejemplo) frases de Requena que el Nasiry “copia fielmente” y a la “sinceridad” de sus informantes (143; abajo).
- Relaciona las últimas palabras de Requena con las teorías de Edward Said: “«En toda guerra sale finalmente vencedor el combatiente que sabe más, no sólo de guerra, sino de todas las cosas de humano conocimiento, porque la guerra es un arte que pide la reunión del saber militar y de todos los demás saberes y endenderes. Los españoles, aunque algo alocados, saben o tienen de los diferentes saberes luces incompletas: lucecitas que todas juntas hacen un gran resplandor en las almas, por el cual se guían hacia donde está la victoria...” (144).
CAPÍTULO V
El criado del Nasiry le cuenta las
peripecias de la guerra (victorias de los españoles, que se preparan
para la afrenta). El Nasiry le explica al "Príncipe" Muley el Abbás (el comandante de las tropas marroquies) de qué "kabila" son los "catalonios" (los catalanes). El Nasiry sale al campo donde toma nota del avance
de las tropas españolas.
- El rito católico se proyecta a través
de la perspectiva musulmana, con “errores y disparates (sacrificios en
el altar, etc.; 145).
- La vista panorámica del narrador errante
incluye un catálogo de los tipos musulmanes: árabes de diferentes
países, representantes de una amplia variedad de tribus africanas,
cada uno identificado por el estilo y color de su traje. Esto puede
tomarse otra vez como señal del propósito didáctico
del autor y de su estilo costumbrista.
“Allí estaba el Mogreb: todo lo vivo y sano de esta tierra de bendición que Allah tiene por suya. Contar los hombres que pisaban el suelo desde las alturas medias de El Darsa a la vaga corriente de Guad El Gelú, habría sido tan difícil como sacar cuenta exacta de las estrellas del Cielo. En el enjambre bullicioso distinguí las rudas facciones del bereber, de ojos encendidos y ágiles movimientos; vi los negros del Sus, de expresión triste y dulce mirar; los muladís, o mestizos de sudanés y bereber, veloces en la carrera y astutos en la intención; vi el árabe de Oriente, cuyo rostro, de belleza descarnada, trae a la memoria la imagen del Profeta, y el árabe español o granadino, de fina tez, fácilmente reconocido por su compostura aristocrática. ¡Y qué variedad de trajes y atavíos! ¡Cuánto más pintoresca nuestra tropa que la de España, en que los soldados van igualmente vestidos, como frailes o alumnos de una escuela eclesiástica! No son personas, sino muñecos fabricados conforme a un vulgar patrón de la industria de sastres. Aquí veo la rica variedad de colores que me dice los gustos de cada tribu y de cada país. Los montañeses del Riff traen sus pardas chilabas terrosas, para que el color les ayude a confundirse con los tonos del suelo; los más pudientes las adornan con caireles y flecos de risueños colores. Ved allí los talebes, de blanca vestidura, y los bereberes de Semmur, gustosos de que los vivos matices de sus trajes ofrezcan blanco seguro al enemigo. De esta otra parte aparecen los ricos árabes tetuaníes y facíes, con el blanco albornoz que ennoblece la figura; los negros bukaras ostentan el rojo de sus gorros puntiagudos; los del Sus visten caftanes listados de blanco y rojo, y los beni-argas y tsuliés combinan el negro y blanco... ¡Qué armonía en esta variedad, y qué hermoso espectáculo el de tanta gente que trae a la guerra la unidad de su fe, manteniéndose cada cual en la forma y colorines que la tradición de su tribu le impone!”
- Lo mismo podríamos decir de la precisión
lingüística (la inclusión de muchos términos
arábigos).
CAPÍTULO VI
El Nasiry ofrece una
crónica de la batalla desde el punto de vista musulmán. Rechaza la
interpretación “peregrina,” ofrecida por su camellero Bu-Haman de que la derrota
de los marroquíes es el castigo divino por su menguante fe (“El Mogreb es
vencido por la tibieza de nuestra fe”).
- Elemento costumbrista: referencia al “cochino”,
“inmundo animal” (156)
- Nota cómo los textos sagrados sirven para
estructurar el relato de el Nasiry. Esto se ve, por ejemplo,
en las últimas palabras de este capítulo (o carta).
CAPÍTULO VII
El Nasiry deambula fuera y dentro de Tetuán, por las "angosta calles," topando con diferentes individuos, repasando los efectos de la
derrota: la desconsolación (religiosa) de los habitantes de la ciudad; el saqueo
en la ciudad y la fuga de los “montañeses” (guerrilleros musulmanes) ante el avance de los "fornidos catalonios" (tropas catalanas).
Los “desmanes” (= excesos, actos contra el orden público) de los
montañeses condicionan la recepción favorable de los tetuaníes
(habitantes de Tettauen o Tetuán) hacia los españoles. Se
concierta la entrega de la ciudad a los españoles y se elige al
“renegado” Torres (nombre musulmán: Gazel) para la embajada.
El Nasiry alega haber renunciado la invitación a participar en esa delegación, a causa de "desagradables cuestiones comerciales" con los españoles de Ceuta.
- Considera la insistencia con la que el Nasiry trata su desprecio por los españoles, en esta crónica epistolar dirigida al príncipe en Fez. ¿Te parece excesiva? ¿Sincera?
- Toma nota de la precisión realista con la que Galdós recrea la ciudad de Tetuán, mediante el paseo del Nasiry:
- lugares: diferentes casas, calles y puertas; el Zoco
- personajes: el poeta Sidi Afailal, hijo d eun famoso cherif; el Yemení Bu Hamam; el Gazel (Torres); Ahmed Abeir; Mazaltob
- Abundan casos de situaciones en que Galdós
fabrica una perspectiva “desde allá” (musulmana / marroquí)
“hacia acá” (sobre un tema nacional). Uno corresponde a la
referencia a los “gigantes catalonios”, o sea “catalanes” que parecen grandes
a los árabes. Trata de identificar otros ejemplos de lo mismo.
- El llanto (planctus, lamento) del poeta Sid Alfailal: ¿corresponde al mito orientalista del árabe fatalista, sensual y supersticioso?
"Luego se volvía hacia Ojos de Manantiales, y con plañidera y delgada voz le decía: «Tú, que has sido siempre pura como paloma blanca, o como el turbante del Imam en el Mumbar (el sacerdote en el púlpito); tú, que eras un jardín espléndido y hermoso, cuyas flores sonreían de felicidad como un lunar en la mejilla de una desposada; tú, cuya belleza es superior a la de Fez, Egipto y Damasco, ¿qué es ahora de ti?». Oyendo estos bellos cánticos, lagrimones como puños brotaban de nuestros afligidos ojos, y el pecho senos oprimía. Volvíase luego el poeta hacia nosotros, y nos declaraba que Tettauen era víctima del mal de ojo, y que padecía la misma suerte que la fabulosa heroína Zarka El Jamama"
- Motivos, temas:
- Alabanza de Tetuán, “Ojos de Manantiales”
(160).
- La falta de disciplina en el ejército
musulmán (162)
- El terror de los montañeses, la visión apocalíptica de la caída de Tetuán (presentada ahora desde dentro, desde "allá").
CAPÍTULO VIII
Después de atestiguar la
horrible agresión de unos “montañeses” contra Mazaltob,
en el Mellah ("el espíritu de caridad surgió en mí con irresistible fuerza"), el Nasiry busca alianzas con otros líderes (Ibrahim) para negociar la paz "al uso europeo, en nombre de nuestro señor el sultán." El "desesperado" Riomesta le narra al Nasiry datos importantes cerca
de Juan Santiuste (“Yahia”): su hija, Yohar, con la ayuda
de Mazaltob, huyó con “el profeta cristiano” (Yahia), que “vino
a meter víboras venenosas en el corazón de mi Perla”.
El Nasiry va en busca de Santiuste (Yahia). Se duerme. La embajada
se reúne con O’Donnell (el “Gran Español”) para concretar
la entrega de la ciudad y son recibidos con enorme cortesía.
- El Nasiry sigue involcando las clasificaciones o categorías raciales planteadas el capítulo V, arriba.
- Perspectivisimo: desde el punto de vista de Riomesta, Santiusta es un profeta "falso y engañador," Mazaltob "perversa."
- Motivo del “fatalismo oriental” (cfr. Edward
Said y Américo Castro): “soñolientos ya, entregados al fatalismo
inherente a la raza” (171)
- Notar: el Nasiry se refiere a su propia "fácil labia" (gift of gab, talent with speech). ¿Cómo aplicar esto a su estilo narrativo/epistolar?
- Vemos aquí otro ejemplo de cómo
las Sagradas Escrituras se convierten para el supuesto moro (el Nasiry)
en una glosa de la historia (en el marco de la ficción, de la novela
histórica): “Con sus pérfidas ficciones de inspiración
celeste, difundió la idolatría y arrastró a las gentes
al vacío”
CAPÍTULO IX
El renegado Gazel (Torres), el “pérfido
español” ("que, como español es un pozo de astutas maldades"), tienta al Nasiry con aguardiente. La pecaminosa
borrachera ("mona") produce un sueño profundo en el que la historia de Yahia
y Yohar se transforma en la de Salomé y San Juan Bautista (Juan
Santiuste > San Juan Bautista, o sea, 'Yahia'). Le halla en esta lamentable condición
su fiel sirviente, Ibrahim, afligido por la brujería de Mazaltob
(padece de cólera).
- Según el Nuevo Testamento, Salomé
pidió la cabeza de San Juan cuando éste no le correspondió
en el amor. Salomé se ha convertido en una de las míticas
“femmes fatales” de la historia.
- En el momento del amanecer, con las tropas españolas a punto de entrar en la ciudad, Ibrahim y el Nasiry recitan versos coránicos que atribuyen al capítulo 103 pero que en realidad corresponden al capítulo 113. Escucha aquí los versos recitados en árabe.
"--Ya viene el día, Sidi... Bendita sea la luz del Sol. ¿Te acuerdas del capítulo Ciento y tres del Korán?
--Sí que me acuerdo. Ese capítulo recito yo todos los días en cuanto veo la luz solar. Es breve y hermoso de toda hermosura y unción. Repitámoslo juntos: «Busco un refugio contra ti, Señor del Alba, Señor del Día... Refugio contra la iniquidad de los seres malos que has creado... Refugio contra el mal de la noche sombría...».
--Refugio contra la perversidad de los que soplan sobre los nudos... Refugio contra los envidiosos.
Tres o cuatro veces repetimos con intensa devoción las sublimes palabras del Profeta. Después me dijo Ibrahim: «En otro lugar del Libro Santo encontrarás el remedio que empleó el Profeta contra el embrujamiento judaico de los once nudos. Has de leer con grandísima devoción y recogimiento once capítulos del Korán; a cada lectura de un capítulo, siempre que sea lectura con piedad, se deshará uno de los nudos, y en cuanto los once sean deshechos, desaparecerá el maleficio»."
CAPÍTULO X
Mientras los soldados españoles
penetran (y se ocupan) de Tettauen (Tetuán), Yohar y Yahia han penetrado
la casa de el Nasiry, “en busca de la paz y la hospitalidad”. Los
dictámenes de Yahia penetran a su vez el cerebro del Nasiry: “Odio
la guerra, y en ella soy todo ineptitud” (183).
- Desde aquí los dictámenes políticos
de Galdós se multiplican. Nota la manera en que Galdós
glosa el acontecimiento histórico con la siguiente declaración:
“la blanca paloma, cogida entre dos fuegos y entre dos iras, no tendría
ya salvación”. En esta novela, el novelista fabrica una imagen
de Tettauen como una ciudad mestiza, culturalmente heterogénea y
poblada de habitantes de identidades ambivalentes. La ciudad se sitúa
además en una especie de limbo o tierra de nadie entre dos ejércitos
propulsores de la ortodoxia (la “ira”, el “fuego”), los “montañeses”
que se van y los “cristianos” que llegan. Trata de formular una impresión
de las implicaciones ideológicas de esta situación.
- “En tu casa, el Nasiry . . . buscamos amparo
. . . fuimos a pedirte hospitalidad”; “en tu morada hallamos consuelo los
perseguidos” (182): así le habla Yahia al Nasiry. ¿Alegóricamente
cómo contribuye esto al significado político del argumento?
- Elemento costumbrista: los árabes se caracterizan
por la “paz” y “hospitalidad” como caracterizan su ámbito
hogareño y su trato hacia las visitas. El nombre de la capital
de Tanzania, Dar es Salaam, significa “casa de paz”. Tal vez estos
factores nos ayuden a ver otro elemento costumbrista en la novela de Galdós.
- La referencia el 6 de febrero (1860) señala
el final del ciclo epistolar.
TETUÁN HOY
Vista panorámica - La muralla y una de las puertas principales - La medina |
|
|
|
CUARTA PARTE: Tetuán, enero-febrero 1860
CAPÍTULO I
Datos ofrecidos por Mazaltob sirven ahora
para retomar el hilo de la historia de Santiuste, desde su llegada a la ciudad de Tetuán (final, segunda parte). Sirven también para construir una nueva perspectiva sobre el período representado
por el Nasiry en sus cartas. Los temas que ella trata son: el encuentro entre Mazaltob
y Juan Santiuste, su herida y cura; el poder retórico de Santiuste
y su honda espiritualidad cristiana; el problema del celibato y el enamoramiento
de Santiuste con Yohar, hija del rabino Riomesta.
- Caracterización de la “raza hebrea”: “Los
hebreos, raza mercantil esencialmente pacífica, sin hogar propio,
privada en absoluto de arrogancias militares, ni amaba ni entendía
la guerra. La espada de Josué desde luengos siglos había
sido vendida como hierro viejo”.
- Las declaraciones de principios políticos
y la interpretación cultural del Magreb se acumulan. Nota las referencias a las relaciones entre los “moros
y judíos”, al anti-clericalismo (característico de Galdós)
y a la naturaleza política del pueblo mogrebí (marroquí)
(187, 190).
"Rodando (Santiuste) por Tetuán, pudo apreciar el aventurero que si moros y judíos se peleaban por cuestiones de ochavos, nunca lo hacían por motivos religiosos: sinagogas y mezquitas funcionaban con absoluta independencia y recíproco respeto de sus venerados ritos. Observó también que los sacerdotes hebreos, así como los musulmanes que sin carácter eclesiástico prestan servicio en los templos del Islam, eran casados, o disfrutaban la posesión de mujeres con más o menos amplitud."
"Profeta de paz no podía ser con los hebreos, que ya desde siglos remotos abominaban de la guerra, ni con los moros, que sólo peleaban a la defensiva, ni con los españoles, que jamás se quitarían de la cabeza el delirio deslumbrador de las empresas militares. Pero no creyéndose llamado a catequizar directamente a las tres razas afines, sentía dentro de sí un vago prurito de manifestar sus ideas, no por los discursos, sino por la acción... más claro: creíase llamado a ser apóstol de la paz, no sermoneándola, sino haciéndola. Ni él mismo se daba explicación del punto de partida de este anhelo en su alma exaltada, ni del fin a que se dirigía con fuerza más instintiva que voluntaria... Pero él, cuando en los camastros de Mazaltob se reponía de sus caminatas callejeras, pensaba: «¿No será vano el artista que predique los principios de la escultura y no sepa labrar una estatua? ¡Ah!, no seré yo ese artista estéril y baldío. A un lado las retóricas que enseñan reglas infecundas, jamás comprendidas del oyente, y hagamos, aunque sea en barro tosco, la estatua de la Paz»."
- Tema: la transformación cultural de Gonzalo
Ansúrez, alias el Nasiry (188). Hay varios factores que nos
interesan aquí.
- Primero, que Galdós tarde tanto en tratar
este tema de manera explícita.
- Segundo, el tema de la conversión en sí.
(Luego veremos que es una conversión problemática).
El caso del Nasiry nos recuerda otros ejemplos de transformaciones o identidades
ambivalentes: Juan Santiuste se convierte en “Yahia”, los judíos
españoles se convierten en “conversos”, los cristianos arabizados
son “muladíes”, términos que se relacionan con el disfraz
que llevan muchos habitantes de esta Tettauen “Ojos de Manantiales”, quienes
encierran un ser o un pasado invisible o remoto.
- Conviene notar además la referencia a Alí Bey el Abassi, que ofreció obviamente el prototipo
para la fabricación del Nasiry. A principios del siglo XIX
el secretario del Estado del rey Carlos IV, Manuel Godoy, decidió
preparar a un catalán nombrado Domingo Badía para realizar
una embajada al norte de África y así abrir el continente
vecino a los intereses comerciales de España. Godoy era un
gran francófilo y su proyecto coincide más con los proyectos
imperialistas de Napoleón Bonaparte, que son militares y académicos
a la vez y que Edward Said analiza en detalle en su ensayo Orientalism.
Según parece, después de dos años de estudio en París
y Londres, “Alí Bey” aprendió el idioma y las costumbres
de los árabes con tal perfección que logró realizar
su embajada por Marruecos, Libia y Egipto pasándose por un jeque
de Alepo (Siria). Sus diarios ofrecen una lectura interesante y son
fundamentales para el estudio del orientalismo español.
|
Domingo Francisco Jordi Badía y Leblich, alias Ali Bey, nacido en Barcelona en 1767, hijo de padre aragonés y madre belga |
|
|
|
CAPÍTULO II
Se narra cómo llegaron Santiuste
(Yahia) y Yohar a enamorarse y casarse, luego sus peripecias durante los
violentos días de febrero de 1860 ("vemos" de nuevo los mismos acontecimientos violentos representados al final de la sección III, en las cartas del Nasiry), hasta que topan con el Nasiry
en el momento de la entrada de las tropas españolas. Yahia (Juan) se disfraza con algún atuendo del Nasiry para salir a la calle.
- La unidad religiosa de las tres "castas" se expresa de nuevo en estos términos: "Dios, Allah y Adonai juntos defendieron las preciosas vidas de los que por ley de amor eran prediolectos de la divinidad" (198)
- ¿Es simbólico que Juan Santiuste
y Gonzalo Ansúrez (Yahia y el Nasiry) se encuentren exactamente
cuando las tropas españolas están a punto de ocupar la ciudad?
- Analiza la siguiente representación de Yohar y el efecto que produce sobre Santiuste:
"Trastornado quedó el profeta de la Paz con la gallardía estatuaria, la gracia inocente y bíblica de la hija de Riomesta. Nunca vio mujer que pudiera igualársele. ¿Qué comparación tenían con Yohar ni Teresa, ni Lucila, ni tantas otras bellezas de allá, embutidas en feísimos trajes negros o pardos, y hablando un lenguaje de hipócrita corrección? Yohar era la mujer oriental o asiática, la Reina de Sabá, Semíramis, Herodías, María de Magdala, y ¿por qué no la mismísima Eva con la menor cantidad de ropa? Después de amar a Yohar, podía un hombre morirse tranquilo, llevándose a la eternidad los dejos de inefable ventura... Se enamoró y envoluntó con el fuego de todas las hornillas de amor encendidas por la juventud y sopladas por los poetas. La imagen de Yohar, tal como en la oficina de perfumes la vio Juan, por instantes se le reproducía en el pensamiento con ilusión perfecta de realidad; por instantes se le borraba, no quedando de ella ni siquiera una vana sombra, y esta privación de la imagen le exasperaba: sin necesidad de conjuro, de improviso volvía la imagen hechicera... Declaraba el poeta que no existía debajo del Sol rostro como el de Yohar, tan bello de frente como de perfil, blanco, amoroso, con resplandor de ternura sentimental, y de gracias veladas aún por la timidez. Los ojos rasgados, dormilones cuando la moza permanecía en silencio, echaban y recogían raudales de luz cuando hablaba. La boca, sin soltar una sílaba expresaba tanto como los ojos. Los ojos, mirando, no hablaban menos que la boca... ¿Y qué decir de la negrura del pelo, que en dos ondas asomaba tan sólo por la frente; qué de aquel pañizuelo de colorines liado en la cabeza con arte exquisito, formando por delante como el pico de una montera, y atrás un bulto que envolvía la madeja liada del abundante cabello? Sobre sus orejas, no pendientes de ellas, sino suspensos del pañuelo por un gancho casi invisible, colgaban dos aros de oro como de cuatro pulgadas de diámetro. Nunca vio Santiuste adorno tan bonito, ni tan oriental, ni tan acomodado a la belleza de Judith o de Dalila. ¡Y qué manos finas, vigorosas! Aquellas manos pudieron cortarle los cabellos a Sansón o separar del tronco la negra cabezota de Holofernes."
¿Qué paralelos podríamos encontrar
entre la técnica de Galdós y el arte del período?
¿Podríamos hablar de un estilo pictórico en la prosa
de Galdós?
- Se vuelve a tocar el tema de Santiuste como mediador
y príncipe de la paz: “¡Oh Yahia, profeta gracioso y venturoso!
Tus empresas de paz dejarán memoria entre los humanos, por lo atrevidas
y eficaces; tú domas el fanatismo, aproximas las razas enemistades
y pides para todos los pueblos la bendición del sumo Dios único”
(197). ¿Qué opinas de esa caracterización?
CAPÍTULO III
Juan y Gonzalo (Yahia y el Nasiry)
huyen de las tropas españolas. La admiración de Juan
por el “prodigio de la metamorfosis” de “alta escuela” conduce al tema
de Alí Bey (otra vez), cuya conversión (como hemos dicho)
fue el producto de una larga y refinada educación. En la conversación
que sigue, Gonzalo revela factores fundamentales: (1) su ideología
política (imitar = conquistar); (2) el contexto de sus cartas (prometió
contar los acontecimientos de la guerra a un benefactor suyo que vive en
Fez); (3) su descarada falsificación de la realidad, a modo de una
crónica disfrazada.
- Evalúa la admiración que Juan siente
por Gonzalo en su conversión al Islam (202)
"Con esto acabó el buen Yahia de ganar la confianza del que tenía por poderoso señor musulmán, o renegado de alta escuela, al estilo de Alí Bey... De veras admiró Juan el prodigio de una metamorfosis bastante perfecta para cautivar en confiada ilusión a todo un pueblo.
Ponderó El Nasiry las ventajas de vivir en Marruecos en calidad de moro, disfrazándose para ello de lenguaje, de costumbres y de religión, y ensalzó el beneficio grande que resulta de existir allí muy pocas leyes, simplificaciónlegislativa que compensaba el bárbaro despotismo del Sultán. Este no era tan intolerable para el hombre flexible y astuto que supiera adaptarse al suelo, y hacer sus pulmones al ambiente de un país sin gobierno excesivo, tiranía ciega y caprichosa. Era cuestión de marrullería, de estudio de los hombres y de conocimiento de la fundamental ciencia del Mogreb, que es la Gramática Parda. Él había estudiado más que cien bachilleres de Salamanca para llegar a la cabal asimilación del Islamismo por el lado religioso, por el civil y moral, y podía decir, aparte toda modestia, que pocos picaron tan alto en la sutileza de la conquista. «La llamo así -prosiguió-, porque conquista personal es lo que yo he realizado, y no hay otra manera de penetrar en esta salvaje familia. Los españoles no imitarán en conjunto mi obra, y por no imitarme, no serán nunca dueños de Marruecos, a pesar de estas guerras y de estas batallitas vistosas... sí, muy vistosas y con música, hijo mío, pero nada más... Y por fin, si tu intención es quedarte aquí, tómame por maestro, y no des un paso ni respires sin consultarme previamente. Prepárate a una labor dura, y trae a tu entendimiento todas las luces que andan por esos mundos, y alguna más que tú inventes, pues la sabiduría y picardía labradas por los demás no son bastantes, y hacen falta picardía y saber nuevos que cada cual debe sacar de donde pueda»."
- En varios momentos Galdós alude al monoteísmo
como enlace esencial entre los judíos, cristianos y musulmanes (en
un momento se refiere a Dios, Allah y Adonai o Jehovah como una sola divinidad).
Aquí (206) vuelve sobre este tema de manera explícita: [el
Nasiry] “Allah me guarde siempre… o Dios, si tú quieres… y en confundirlos
no hay pecado, que de estrellas arriba el que manda es quien es, y no se
cura de que así le demos este nombre o el otro”. ¿Qué
paralelos podríamos trazar entre estas referencias y la presentación
de la Guerra de África como una “guerra civil”?
- Importante: nota la oposición que surge
entre Santiuste y Ansúrez (Yahia y Nasiry) en torno al tema del
fingimiento (204).
CAPÍTULO IV
En su paseo final por Tetuán
Juan topa con el escritor Pedro Antonio de Alarcón y plantea el
dilema político final: “Si vosotros con el acero y la pólvora
habéis hecho una gran conquista de guerra, yo, con pólvora
distinta, he hecho una conquista de paz. ¿Cuál será
más duradera, Perico…?”
- ¿Por qué crees tú que Galdós
termina este episodio nacional con una pregunta abierta?
TEMAS GENERALES
- Evalúa la manera en que Galdós
fabrica a Nasiry, el muladí, como cronista no fidedigno. Trata
de evaluar sus motivos por concederle a él la palabra, por someter
a su autoridad el relato de la guerra desde la perspectiva mogrebí.
- ¿Deberíamos sacar alguna conclusión
en relación al costumbrismo galdosiano?
- ¿Cómo se relacionan historia y
ficción en esta novela?
- Evalúa la representación de Tetuán como una especie de
limbo o tierra de nadie poblada por cristianos, judíos y musulmanes,
por conversos, muladíes (renegados) y sefardim.
- Trata de resumir las diferentes maneras en que
Galdós proyecta perspectivas contrastantes. ¿Crees
que esta técnica se funda sobre alguna base ideológica?